Tratamiento
El objetivo principal del tratamiento del infarto agudo del miocardio es evitar la muerte del enfermo, evitar la necrosis del miocardio en riesgo y la extensión del mismo, evitar la aparición de complicaciones o dar tratamiento a ellas si ya se han presentado. Los tratamientos que suelen realizar son:
- La administración de Oxigeno a 2 ó 4 litros por minuto.
- Reposo absoluto.
- Calmar el dolor: Inicialmente con nitroglicerina, y si no cede con morfina (siempre y cuando la frecuencia cardiaca no sea menor de 60 latidos por minuto).
- El uso de sedantes.
- El uso de laxantes para evitar el estreñimiento y esfuerzo que pueda derivar de ello.
- Uso de AAS (Aspirina) a razón de 160-325 mg
- Y lo más importante: la terapia de re perfusión que desde que se inventó a dado mucho éxitos en el tratamiento, siempre y cuando esta se haga entre las 3 a 6 horas despues de haberse iniciado el infarto.
